En caso del fallecimiento de un cliente, lo que pasa con la bonificación del estado va a depender si existen o no beneficiarios de pensión de sobrevivencia.
Si el cliente tiene beneficiarios, la bonificación se usa para pagar la pensión. En el caso de que no existan beneficiarios, devolvemos la bonificación a la Tesorería General de la República (TGR) en un plazo no mayor a 10 días hábiles desde que tomamos conocimiento del fallecimiento.